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El inicio del viaje en el tiempo del Grupo Scout BROWNSEA se remonta a mayo de 2006, el primer encuentro en Aguadulce de Scouts Católicos, una treintena de chicos y chicas de nuestro barrio y los Grupos Scouts Zálata y Mónsolis de Almería, padrinos de nuestro Grupo, disfrutamos de una gran convivencia.
Desde el comienzo el Grupo se vinculó a la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, a la cual le estamos muy agradecidos por brindarnos esta oportunidad de servicio y cuyos valores Católicos compartimos en su totalidad.
El objetivo principal en la fundación del grupo, era y es ofrecer a los jóvenes de nuestro entorno, una serie de actividades mediante las cuales, asumieran valores tales como el compañerismo, la amistad, el respeto a la naturaleza, el servicio a la comunidad… todo a través de un marco simbólico y apoyados en la naturaleza.
Nuestro principal símbolo, la pañoleta, lleva los colores verde de la naturaleza, el blanco de la pureza y de fondo el amarillo de Nuestra Señora la Virgen del Carmen.
Los valores de nuestro Grupo son los Principios Scouts, estos brindan una escala de valores que ayuda a cada uno de los muchachos a trazar su propia escala, y que está comprendida en los principios filosóficos vertidos en la Promesa y la Ley Scout
Nuestro lema: “Gente pequeña en lugares pequeños haciendo pequeñas cosas, consigue cambiar el mundo”, este lema lo vivimos como un viaje hacia lo desconocido; un viaje que SE CONVIERTE EN AVENTURA de la que disfrutamos con intensidad.
El Grito de “¡¡Scouts!! .. ¡¡Siempre Listo!!“ resuena todos los sábados en los jardines de nuestra Parroquia, representa la actitud permanente del scout ante la llamada del Gran Jefe y el prójimo ( Mt 24,42) …para Servir”, es la gran respuesta que surge del verdadero amor a Dios y al prójimo.
Han pasado ya algunos años desde que nuestro grupo iniciara su andadura en el escultismo. En este tiempo nos han ayudado muchas personas, unas han colaborado como responsables, grupo de padres; y otras en cambio, como son los niños, nos han permitido enseñarles los valores del método scout, pero además nos han enseñado grandes cosas y ante todo a llevar siempre una sonrisa.
Como alguien dijo: “Tenemos que hacer del escultismo un viaje apasionante, enriqueciéndonos y aprendiendo los unos de los otros, caminando juntos, uniendo esfuerzos. Nos llena de orgullo mirar atrás y ver el camino recorrido juntos. Pero aún mejor es soñar la aventura que nos queda por vivir, el mucho trabajo común que tenemos por delante.”
la frase “gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo” se atribuye a Eduardo Galeano, aunque algunos eruditos la trasladan hasta el siglo XVIII para poner términos parecidos en boca de San Juan Bautista de La Salle.